Antes de la Agilidad… La Comprensión.
La importancia de conocer al cliente y el producto antes de iniciar el marco ágil .
Como coach de agilidad, uno de los aspectos más críticos de la implantación de un marco ágil es comprender al cliente y el producto antes de realizar cualquier cambio.
Muchas empresas enfocan Agile como una solución «milagrosa» a sus problemas sin comprender los principios y valores subyacentes de Agile. Este enfoque suele conducir al fracaso y la frustración. Para ayudarte a evitar estos escollos, aquí tienes los siete puntos clave, que a mi entender, puedes tomar en cuenta antes de iniciar un marco Agile con un cliente.
1.- Comprender los objetivos empresariales del cliente
El primer paso para implantar Agile es comprender los objetivos empresariales del cliente. ¿Cuáles son sus objetivos? ¿Qué intentan conseguir? ¿Cuáles son sus puntos débiles? Al comprender sus objetivos empresariales, puedes adaptar el marco Agile a sus necesidades específicas. Agile no es una solución única y es fundamental adaptarla a la situación particular del cliente. Tómate el tiempo necesario para hablar con todos los involucrados y comprender el objetivo principal y, a partir de ahí, empezar a construir la estrategia.
2.- Entender el producto y sus usuarios
El siguiente paso es entender el producto y sus usuarios. ¿Quiénes son los usuarios? ¿Cuáles son sus necesidades? ¿Cuáles son sus puntos débiles? ¿Qué características son esenciales para ellos? Comprender el producto y sus usuarios permite priorizar el backlog y garantizar que se ofrezca valor a los usuarios. De nuevo, más vale invertir tiempo en al principio para conocer el entorno, el producto y los usuarios, que tener que re trabajar después.
3.- Evaluar la cultura organizativa del cliente
Agile requiere un cambio cultural dentro de una organización. Es esencial evaluar la cultura organizativa del cliente para saber si está preparado para adoptar Agile. Si la cultura del cliente es jerárquica y de mando y control, puede ser difícil implementar Agile con éxito. En tales casos, puede ser necesario trabajar en cambiar la cultura antes de implementar Agile.
4.- Identificar el proceso de desarrollo actual del cliente
Comprende el proceso de desarrollo actual del cliente. ¿Cómo desarrollan el software? ¿Cuáles son sus puntos débiles? ¿Qué funciona bien y qué no? Al comprender su proceso, puedes identificar áreas de mejora y adaptar el marco Agile en consecuencia. También es importante identificar a los líderes de los equipos, para hacerlos aliados en todo este proceso de cambio. Aquí, generar un mapa de vecinos puede ayudarte.
5.- Determinar el nivel de adopción de Agile
Agile no es un enfoque de todo o nada. Te recuerdo que existen distintos niveles de adopción de Agile, desde el marco básico de Scrum hasta enfoques más avanzados como Scaled Agile Framework (SAFe). Como parte de la estrategia, determinar el nivel de adopción de Agile adecuado para tu cliente. Si el cliente es nuevo en Agile, puede ser mejor empezar con Scrum y adoptar gradualmente enfoques más avanzados a medida que se sienta más cómodo con Agile. De nuevo reitero la importancia de tomarse el tiempo para conocer el entorno y con qué se cuenta.
6.- Definir métricas de éxito
Es esencial definir métricas de éxito antes de implementar Agile. ¿Cuáles son los objetivos del cliente? ¿Cómo medirán el éxito? Al definir las métricas de éxito por adelantado, puedes asegurarte que todo el mundo está de acuerdo en lo que significa el éxito y realizar un seguimiento del progreso hacia esos objetivos. No olvidemos que la única forma de saber cuánto hemos mejorado, es midiendo el progreso.
7.- Establecer un plan de comunicación e interpretación claro
Por último, es fundamental establecer un plan de comunicación e interpretación claro. Agile requiere una comunicación frecuente entre el equipo de desarrollo, el product owner y los stakeholders. Es esencial definir cómo se producirá la comunicación, quién participará y con qué frecuencia. Una comunicación clara garantiza que todos estén de acuerdo con las prioridades y el progreso. Además que todo el equipo comprenda qué significa una palabra.
Con la globalización y el home office cada vez hay más equipos formados por personas en diferentes países y culturas por lo que es vital que cada persona comprenda a qué se refiere cada palabra en un proyecto; Cuidar tener un lenguaje homogéneo y claro para todos.
Conclusión
Implantar Agile requiere algo más que adoptar un nuevo marco. Requiere un profundo conocimiento de los objetivos empresariales, el producto y la cultura organizativa del cliente. Con lo anterior, generar una estrategia de acuerdo al cliente y no olvides que siguiendo estos siete puntos, puedes asegurar que estás adaptando el marco Agile a la situación única del cliente y aumentando sus posibilidades de éxito.
Agile es un viaje, no un destino.
Se necesita tiempo, esfuerzo y compromiso para alcanzar el éxito deseado.